Dear Friends in Christ,
I write to you with news about St. Paul’s in Maryville.
As you know, St. Paul’s was closed before I arrived as your Bishop Provisional. My initial thought was to try to reopen it. To that end, I invited a group from around the diocese, the Rev. Collin Larimore, the Rev. Cn. John Spicer, the Rev. Cn. Robin James, the Rev. Chas Marks, the Rev. Joe Pierjok, the Rev. Stan Runnels, the Rev. Galen Snodgrass, the Rev. Sid Breese, the Rev. Isaac Petty, and Treasurer Tom Kokjer, to look at possibilities for re-opening St. Paul’s. (It should be noted that this would have been the second time that St. Paul’s would have been reopened – it had closed and was reopened once before.) This group worked for many months to look at opportunities to restart St. Paul’s, examining everything from creation care, to linking with the University, to creating an intentional residential community there.
After much discussion, the Maryville Committee asked the Property Committee to weigh in on the repairs needed to return the church building and rectory to working order. A team from the Property Committee, including Canon David Powell (chair), the Rev. Galen Snodgrass, Tom Kokjer, and Phillip Lofflin went to Maryville to inspect the property, where they were met by Fr. Sid Breese and Channing Horner. The Property Committee determined that the improvements necessary to bring the church building and rectory back to workable and livable condition would be too cost-prohibitive – and would need to be done before any money could be put into starting a new congregation there. Therefore, working with the Maryville Committee and the Property Committee, the Standing Committee and I have agreed that the best course of action is to sell the Maryville property. The Diocesan Council will be tasked with the final decision as to the use of the funds after the sale of the property.
I want to thank Channing and Louise Horner for their faithfulness and dedication in looking after the property all these years. There will be a service to honor the ministry done in the name of Jesus Christ there, with a diocesan celebration for all who can gather.
Your Standing Committee and Diocesan Council met in retreat in early February to talk about ways we can work with congregations to assist in their continued presence throughout West Missouri. Some of our new budget categories were created to address needs in our congregations: the Centralized and Property Grants Committees, the Ministry Developers and the Curacy Program. We are still in the process of formulating the grant processes and hope to have an official announcement about their opening soon.
Please don’t hesitate to contact me if you have any questions about this difficult decision.
Queridos amigos en Cristo,
Les escribo con noticias sobre San Pablo en Maryville.
Como saben, San Pablo fue cerrada antes de que yo llegara para ser su Obispa Provisional. Mi primera idea fue intentar reabrirla. Y para eso, invité al siguiente grupo de la diócesis, Rvdo. Collin Larimore, Rvdo. Cn. John Spicer, Rvda. Robin James, Rvdo. Chas Marks, Rvdo. Joe Pierjok, Rvdo. Stan Runnels, Rvdo. Galen Snodgrass, Rvdo. Sid Breese, Rvdo. Isaac Petty y al Tesorero Tom Kokjer, para estudiar las posibilidades de reabrir San Pablo. (Cabe señalar que esta hubiera sido la segunda vez que San Pablo habría sido reabierta – había cerrado y fue reabierta una vez anteriormente). Este grupo trabajó durante muchos meses para buscar oportunidades para reactivar San Pablo, examinando todo, desde el cuidado de la creación, la vinculación con la Universidad, hasta la creación de una comunidad residencial intencional allí.
Tras muchas discusiones, el Comité de Maryville solicitó al Comité de Propiedades una valoración sobre las reparaciones necesarias para que el edificio de la iglesia y la rectoría volvieran a funcionar. Un equipo del Comité de Propiedades, formado por el canónigo David Powell (presidente), Rvdo. Galen Snodgrass, Tom Kokjer, Phillip Lofflin, se desplazó a Maryville para inspeccionar la propiedad, donde fueron recibidos por el Padre Sid Breese y Channing Horner. El Comité de Propiedad determinó que las mejoras necesarias para llevar el edificio de la iglesia y la rectoría de nuevo a una condición factible y habitable serían demasiado costosas – y tendrían que hacerse antes de que cualquier dinero pudiera ser destinado para iniciar una nueva congregación allí. Por lo tanto, en colaboración con el Comité de Propiedades y el Comité de Maryville, el Comité Permanente y yo, hemos acordado que lo mejor es vender la propiedad de Maryville. El Consejo Diocesano será el encargado de tomar la decisión final sobre el uso de los fondos tras la venta de la propiedad.
Quiero agradecer a Channing y Louise Horner su fidelidad y dedicación en el cuidado de la propiedad durante todos estos años. Tendremos un servicio para honrar el ministerio realizado allí en nombre de Jesucristo, con una celebración diocesana para todos los que puedan reunirse.
Su Comité Permanente y el Consejo Diocesano se reunieron en retiro a principios de febrero para hablar sobre las formas en que podemos trabajar con las congregaciones para ayudar en su presencia continua en todo el oeste de Missouri. Algunas de nuestras nuevas categorías presupuestarias fueron creadas para atender las necesidades de nuestras congregaciones: los Comités de Subvenciones Centralizadas y de Propiedades, los Desarrolladores de Ministerios y el Programa de Curatos. Todavía estamos en el proceso de formular los procesos de subvención y esperamos tener pronto un anuncio oficial sobre su apertura.
No duden en ponerse en contacto conmigo si tienen alguna pregunta sobre esta difícil decisión.